domingo, 6 de mayo de 2007

Y qué fue de las Guindis????


Año 2089 D.G. (después de las Guindillas, se entiende).- En un mundo totalmente globalizado, sin GMTs ni nada que se le parezca, la pregunta es..."y qué ha sido de las Guindillas??".

Tras arduas labores de investigación en un tal Google Premium (ojo, que a día de hoy no está aún disponible), se descubre que después de reiterados fracasos por mantener una conversación en Aquelarre como en los viejos tiempos, las Guindis se separaron (snif, snif). La dejadez se convirtió en rutina, y la inercia hizo el resto. Cada una siguió su camino...la Guindi morena se en
fadó con la archiconocida dietista, dejó sus clases de Romano y se dedicó al arte, siendo musa inspiradora del afamado artista J.A.R. En la actualidad, su legado puede contemplarse tanto en el MOMA como en el Tate - Tita Thyssen intentó conseguir parte de la colección, pero ni encadenándose a los árboles!- ; la Guindi rubia decidió matricularse en la autoescuela tras conseguir la correspondiente acreditación de la Generalitat. Como siempre demostró maneras con el carro de Pepelu, apostó por abandonar a sus dear cenutrios y se dedicó al automovilismo de alto nivel -si, Faragocito de copiloto-. Se hizo millonaria, y se compró no uno ni dos, sino una manzana entera de pisos en Girona; mientras, la galaica intentó triunfar de nuevo en el siempre exigente festival de Llerena, siendo ganadora tres años consecutivos. Sin embargo, su adicción al chocolate y al café la llevaron por el mal camino - artísticamente hablando- . Recondujo su carrera como imagen de una conocida marca de chocolate que casualmente, también tiene división cafetera, y como tenía mucho tiempo libre se entretuvo también con la cría de vaquitas con gafas de sol en la siempre neutral Helvetia.

Y del Pollo??? Qué fue del Pollo???

1 comentario:

Anónimo dijo...

Desde el Real Automóvil Club de Cataluña (RACC) nos congratulamos de la buena nueva referente a la obtención del permiso de conducción por Dª Guindilla Rubia al enésimo intento.
Efectivamente, desde este espacio, queremos aclarar definitivamente que dicho permiso de conducción nunca fue expedido en Gibraltar ni en el Congo Belga y que, después de muchos avatares al volante, el profesor de autoescuela de la Guindilla ha podido jubilarse con todos los honores (y sin huesos rotos, a Dios gracias).
Desde aquí nuestro "Hip-Hip-Hurra" más afectuoso.

Sr. Ferran Alonso Ruedas de Fitipaldi, Presidente del RACC